El reciente desmantelamiento de QakBot, una red de malware avanzada, ha marcado un hito significativo. En este artículo profundizaremos en el impacto de esta operación, explorando las estrategias de mitigación y prevención que las organizaciones y usuarios individuales pueden adoptar para protegerse en el cambiante panorama de amenazas cibernéticas.
¿Qué es QakBot?
QakBot, también conocido como QBot o QuakBot, es un tipo de malware bancario y troyano que ha estado activo desde al menos 2008. Diseñado para robar credenciales bancarias y realizar fraudes financieros, QakBot se ha desarrollado con el tiempo para incluir capacidades de puerta trasera, permitiendo a los atacantes controlar sistemas infectados, esparcirse en redes y entregar cargas útiles adicionales, como ransomware.
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Desmontando Qakbot y Sus Desafíos
En el proceso de eliminación, las autoridades usaron órdenes judiciales para erradicar Qakbot de dispositivos afectados. Se estimó que 700.000 dispositivos globalmente, incluyendo 200.000 en EE. UU., estaban infectados al momento del desmantelamiento. No obstante, informes recientes indican que Qakbot podría seguir activo aunque en menor medida.
La falta de arrestos durante la operación sugiere que la infraestructura de Qakbot para la distribución de spam sigue intacta, manteniendo activos a sus operadores y representando un peligro continuo.
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Medidas de Prevención Contra Futuras Amenazas
Te aconsejamos varias medidas clave para salvaguardarse contra un resurgimiento de Qakbot o amenazas similares:
- Implementación de autenticación multifactor (MFA): Especialmente crítica en sectores de infraestructura vital como el sanitario, la MFA puede prevenir ataques automatizados.
- Capacitaciones de seguridad regulares para trabajadores: Educar sobre prácticas seguras, como evitar enlaces dudosos y verificar el origen de los enlaces.
- Actualización de software corporativo: Mantener al día sistemas operativos, aplicaciones y firmware, utilizando sistemas centralizados de gestión de parches.
- Eliminación de contraseñas débiles: Seguir las directrices del NIST para políticas de contraseñas y priorizar MFA sobre las contraseñas.
- Filtrado del tráfico de red: Bloquear comunicaciones con IPs maliciosas conocidas mediante listas de bloqueo/permiso.
- Plan de recuperación: Desarrollar y mantener un plan para guiar a los equipos de seguridad en caso de una infracción.
- Regla de respaldo "3-2-1": Tener al menos tres copias de datos críticos, dos en ubicaciones distintas y una fuera de sitio.
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¿Cómo saber si se ha sido infectado por Qakbot en el pasado?
Hay buenas noticias para quienes temen haber sido infectados previamente por Qakbot. El Departamento de Justicia ha recuperado más de 6.5 millones de contraseñas y credenciales sustraídas por los operadores de Qakbot. Para comprobar si la información de inicio de sesión ha sido expuesta, se pueden utilizar los siguientes recursos:
- ¿Me han engañado?: Un sitio que permite verificar si tu email ha sido comprometido en brechas de datos, incluyendo datos de Qakbot.
- Check Your Hack: Desarrollado por la Policía Nacional Holandesa con datos incautados de Qakbot, permite comprobar si su email está entre los afectados.
- Lista de las peores contraseñas: Ya que Qakbot utiliza contraseñas comunes para ataques de fuerza bruta, revise esta lista para asegurarse de que su contraseña no sea una de las más vulnerables.
El éxito en la desarticulación de redes como QakBot es un paso importante en la lucha contra el cibercrimen. Sin embargo, la naturaleza dinámica de las amenazas cibernéticas significa que tanto las organizaciones como los usuarios individuales deben permanecer vigilantes y adaptarse continuamente a nuevas tácticas y técnicas.
El desmantelamiento de QakBot es un recordatorio de la constante evolución del panorama de amenazas cibernéticas. Adoptar un enfoque proactivo y educativo, combinado con soluciones de seguridad robustas y prácticas de gestión de riesgos, es esencial para navegar en este entorno desafiante. La colaboración y el intercambio de información entre diferentes sectores son igualmente críticos para mantenerse un paso adelante de los actores de amenazas.