La brecha digital entre personas mayores y jóvenes ha disminuido significativamente, especialmente debido al confinamiento causado por la pandemia, que ha obligado a los mayores de 65 años a utilizar tecnologías como Zoom, Skype y WhatsApp. Sin embargo, esta mayor conexión en línea también ha llevado a un aumento en los fraudes y ataques cibernéticos dirigidos a esta población, que a menudo carece de experiencia en internet. Por lo tanto, te recomendamos que estes muy alerta ante las nuevas tácticas utilizadas por los cibercriminales.
La estafa del abuelo es una modalidad de engaño en la que estafadores, haciendo uso de la Inteligencia Artificial (IA), imitan la voz de nietos o familiares para persuadir a los mayores de enviar dinero de manera urgente.
Este tipo de estafa telefónica se caracteriza por llamadas en las que el interlocutor demanda asistencia financiera inmediata y solicita que se mantenga en secreto.
La participación de la IA en esta estafa complica la detección de estos fraudes, ya que perfecciona la simulación de voces conocidas, llevando a que las posibles víctimas disminuyan su nivel de precaución.
Para protegerse de la estafa del abuelo, es fundamental verificar la identidad de la persona al otro lado de la línea, incluso si su voz parece familiar. También se recomienda comunicarse con otros familiares para confirmar la situación y nunca divulgar información personal o financiera por teléfono. Una medida preventiva importante es educar a las personas mayores sobre cómo identificar y gestionar llamadas sospechosas.
En caso de encontrarse en una situación similar, es importante mantener la calma y hacer preguntas que solo el supuesto familiar podría responder. La instrucción y concientización de la población mayor son cruciales para combatir este tipo de delitos que se aprovechan de la confianza y el cariño entre abuelos y nietos.
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Las estafas románticas causaron que las víctimas perdieran un total de 1.300 millones de dólares el año pasado solo en los Estados Unidos, según informó la Comisión Federal de Comercio (FTC).
En estas estafas, los delincuentes inicialmente contactan a sus víctimas a través de redes sociales y luego trasladan las comunicaciones a plataformas como WhatsApp o Google Chat.
Esta modalidad de estafa afecta especialmente a adultos mayores que se aventuran en el mundo de las citas en línea, donde los estafadores establecen una conexión emocional que luego se convierte en una solicitud de dinero bajo pretextos como enfermedades, lesiones o problemas legales, además de ofrecer falsas oportunidades de inversión.
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Se ha descubierto un esquema fraudulento que está afectando a los titulares de seguros, en el cual agentes sin escrúpulos solicitan el pago de primas de seguros directamente a ellos en lugar de a la compañía aseguradora, apropiándose de los fondos.
Este engaño puede pasar desapercibido hasta que la víctima necesita hacer uso de su póliza de seguro y descubre que ha sido cancelada debido a la falta de pago.
Para prevenir convertirse en víctima de este tipo de fraude, los consumidores deben tomar precauciones al realizar los pagos de sus seguros.
Los expertos aconsejan siempre pagar directamente a la compañía de seguros y evitar transacciones en efectivo, que son difíciles de rastrear. En caso de que sea necesario realizar un pago en efectivo, es esencial exigir un recibo como comprobante del pago realizado.
Además, es importante mantenerse alerta ante posibles notificaciones de cancelación y comunicarse inmediatamente con la compañía aseguradora para verificar la situación en lugar de hacerlo con el agente de seguros.
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Se ha observado un aumento en los casos en los que agentes financieros fraudulentos persuaden a los inversionistas para que transfieran su dinero a cuentas bancarias controladas por ellos, sin invertir posteriormente en la anualidad acordada. Los afectados por esta artimaña enfrentan la posible pérdida de sus ahorros destinados a la jubilación.
Para evitar caer en este tipo de fraude, se recomienda examinar cuidadosamente las necesidades personales y consultar con un asesor financiero de confianza antes de realizar cualquier movimiento financiero.
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Falta de Familiaridad con la Tecnología: Muchos adultos mayores no crecieron con la tecnología actual, lo que puede hacer que les resulte difícil distinguir entre una comunicación legítima y un intento de fraude.
Aislamiento Social: Los abuelos a menudo experimentan mayor soledad, lo que los puede hacer más susceptibles a estafas de tipo "phishing" que se aprovechan de la necesidad de conexión.
Confianza y Cortesía: La generación mayor tiende a ser más confiada y menos propensa a cuestionar la legitimidad de una solicitud, especialmente si parece provenir de una fuente oficial.
Información Actualizada: Mantener a los abuelos informados sobre las últimas estafas y tácticas utilizadas por los delincuentes.
Cursos de Alfabetización Digital: Fomentar su participación en cursos que enseñen sobre seguridad en Internet.
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Contraseñas Fuertes: Enseñarles a crear y gestionar contraseñas robustas y únicas para cada cuenta.
Actualizaciones de Software: Asegurarse de que sus dispositivos estén actualizados con las últimas versiones de software y antivirus.
Navegación Segura: Instruir sobre el uso de sitios web seguros (buscar el candado en la barra de direcciones y preferir sitios con 'https').
Identificar Phishing: Enseñarles a reconocer señales de alerta en correos electrónicos y mensajes, como errores gramaticales o direcciones de remitente extrañas.
Verificación Doble: Animarlos a verificar la legitimidad de cualquier solicitud contactando directamente a la empresa o persona a través de canales oficiales.
No Compartir Información Sensible: Recordarles que nunca deben compartir información personal o financiera en respuesta a una solicitud no solicitada.
Configuración de Cuentas: Ayudarles a configurar sus cuentas en línea, asegurando que se utilicen las medidas de seguridad adecuadas.
Monitoreo Regular: Ofrecer revisar periódicamente sus cuentas y dispositivos para detectar posibles irregularidades.
Línea de Ayuda: Proporcionarles un contacto de confianza para consultar en caso de dudas sobre una actividad en línea.
Proteger a los abuelos de las estafas en Internet es un esfuerzo conjunto que requiere educación, prácticas de seguridad adecuadas y un apoyo continuo. Al seguir estas recomendaciones, podemos ayudar a garantizar que nuestros seres queridos mayores disfruten de los beneficios de Internet sin caer en las trampas de los ciberdelincuentes. Recordemos que la prevención y la información son nuestras mejores herramientas en la lucha contra las estafas en línea.