Si trabajas en ciberseguridad, seguramente ya notaste algo: lo que antes parecía “normal” en el correo electrónico ya no lo es. Los atacantes están usando IA, automatización y nuevas técnicas de evasión a gran escala, y eso está empujando a los CISO y a sus equipos a replantear por completo sus estrategias.
El Informe de Ciberseguridad 2026 de Hornetsecurity analiza más de 70 mil millones de correos y confirma lo que desde TecnetOne también vemos cada día: el email sigue siendo el principal punto débil. Pero ahora, además, se ha convertido en un canal más sofisticado y peligroso.
A continuación te contamos, con detalle, cómo están evolucionando las amenazas y qué necesitas reforzar para evitar que este vector afecte la continuidad de tu negocio.
Aunque han surgido canales de ataque más complejos, el correo electrónico sigue siendo el favorito de los delincuentes. Y no es casualidad: sigue siendo el medio más fácil para engañar usuarios, evadir defensas y activar cadenas de ataque completas.
El informe revela que:
Esto no solo impacta en incidentes aislados, sino que está provocando compromisos de cuentas, interrupciones operativas y brechas con alto impacto reputacional.
Uno de los hallazgos más preocupantes es el regreso de tipos de archivo que muchos SOC ya no consideraban peligrosos:
Los atacantes saben que los defensores han bajado la guardia con estos formatos básicos, así que los están usando para esconder payloads, enlaces maliciosos o scripts.
Los delincuentes ahora manipulan:
Su objetivo no es engañar al usuario, sino engañar a tus filtros. Lo que buscan es activar intrusiones multietapa pasando desapercibidos el mayor tiempo posible.
Después de un breve descenso, el ransomware regresó con fuerza:
Y el correo ya no es la única vía. Los atacantes combinan:
Más de una cuarta parte de las infecciones entra por endpoints, y cada vez más organizaciones reportan robo de credenciales como vector inicial.
Pero esto no significa que el riesgo disminuya. Los grupos criminales están usando IA para acelerar su reconocimiento, automatizar escaladas de privilegios y desarrollar campañas más coordinadas.
En la práctica, la IA está ayudando a ambos lados. Pero en el lado ofensivo, el avance es más rápido.
Los CISO coinciden en que la IA ha incrementado el riesgo de ransomware y estafas. Por eso, más de dos tercios ya invierten en detección y análisis impulsados por inteligencia artificial.
Pero hay un problema: La gobernanza no está avanzando al mismo ritmo.
Los usuarios utilizan herramientas de IA públicas sin saber los riesgos. La alta dirección no siempre entiende el impacto. Y la formación sigue siendo inconsistente.
Entre las nuevas tendencias destacan:
Esto amplía la superficie de ataque y hace más difícil proteger datos sensibles.
Conoce más: Qué Hacer Si Recibes Un Correo Sospechoso: Guía para Trabajadores
Los kits de intermediario (AiTM) ya pueden evadir muchos tipos de MFA robando tokens de sesión en tiempo real. Además:
Son métodos muy sólidos, pero su adopción sigue siendo baja y la experiencia entre plataformas sigue fragmentada.
Varios ataques recientes se dieron porque:
La identidad sigue siendo uno de los puntos más débiles en cualquier organización.
Las plataformas SaaS se han convertido en un objetivo directo para obtener:
El robo de tokens de OAuth es uno de los problemas más graves. Revocar accesos suele ser la única forma de frenar el abuso.
Igualmente, las extensiones de navegador maliciosas son otra vía para evadir controles o robar información confidencial.
A pesar de toda la tecnología de seguridad disponible, el correo sigue siendo el canal donde más bajamos la guardia. Y eso lo convierte en el punto ciego perfecto para los atacantes.
Los hallazgos del informe dejan claro que:
En TecnetOne lo repetimos siempre: si no fortaleces lo básico: correo, identidad, MFA resistente al phishing, gestión de SaaS y procesos internos; cualquier inversión avanzada se queda corta.
El correo electrónico no está “pasado de moda”.
Está más vivo, más peligroso y más evasivo que nunca.